[vc_row][vc_column][vc_column_text css=”.vc_custom_1544057740734{margin-bottom: 25px !important;}”]Empresarialmente, todos tenemos un círculo cercano de personas con las cuales interactuamos regularmente. Éstas, por lo general, comparten con nosotros algunas semejanzas que nos permiten afianzar la confianza y movernos dentro de una misma zona de confort.
Pero, ¿qué sucede cuando nos exponemos a empresarios que operan en giros de negocio distintos a los nuestros o cuando llegamos a un evento donde hay que interactuar con clientes, proveedores y competidores importantes?
Las relaciones humanas, en muchos aspectos terminan siendo como los hábitos. Una vez que los implantamos en nuestro cerebro, son difíciles de dejar de lado y, en ocasiones, no nos percatamos de lo automático que lo hacemos.
Les compartimos 7 aspectos relevantes que debe usted tener en cuenta para que su entorno empresarial cada vez sea más próspero:
Deje el ego en la casa
El ego es un enemigo silencioso para los negocios que cuesta mucho dejar de lado. Normalmente, vamos a encontrar una buena excusa para justificarlo pero, como dicen por ahí: “es mejor dejar el ego en la casa y generar riqueza, que ganar una discusión”.
Sea moderadamente formal
Los negocios los realizan personas con la confianza de base, es por esto que la formalidad es relevante para que la contraparte sienta el grado de interés y seriedad que tenemos hacia él/ella. Estamos seguros que usted comprende la expresión “la confianza rompe el saco”.
Sea conciso
Los empresarios siempre tienen muchas ideas de nuevos negocios y una energía permanente para explorar. Por ende, es muy relevante que la gente conozca en lo que realmente usted y su empresa son excepcionales. Luego tendrá espacio para ampliar todos sus posibles proyectos; no obstante, lo primero es comunicar sus distinciones.
Hágase amigo del orden
El orden puede ser igual o más importante que el producto o servicio que usted genere… Aunque usted tenga todo bien delegado, la esencia de la empresa se mide por la forma en como sus líderes la administran. Por lo tanto, si hay orden, sus clientes, proveedores y empleados lo van a notar. De lo contrario, el que lo va a notar es usted en sus ingresos.
Cuide su presentación personal
Existe un amplio criterio cuando se habla de presentación personal. No vamos a decir cuáles son los estilos correctos o inapropiados… Lo que sí les podemos afirmar es que hay características básicas que hay que cuidar. Pídale a su círculo de confianza que le dé una opinión abierta y sincera sobre su presentación. Podría encontrarse con algunas sorpresas que le podrán ayudar a mejorar en este aspecto. En este aspecto, esté abierto a recibir de forma dinámica criterios muy diferentes a los suyos.
La calidad no es negociable
Sea lo que sea que usted haga, la calidad de su gestión debe ser impecable. De esto se trata la integridad. Esto no es negociable. Las personas exitosas se rodean de otros que valoran las cosas bien hechas. Podríamos resumir que “hay que hacer por otros lo que me gustaría que me hicieran a mí”.
La credibilidad es su meta
La credibilidad es el detonante de la confianza que le va a ayudar con sus negocios. Trabajar en demostrar que usted realmente es un profesional debe ser su meta. Es importante que su demostración de solidez sea natural pues las personas pueden diferenciar cuando alguien quiere aparentar algo que no es en realidad.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
